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martes, 7 de enero de 2014

LA CONTAMINACIÓN DE LAS AGUAS MARINAS Y CONTINENTALES.





Las actividades humanas introducen graves modificaciones en los flujos de agua, alterando los ciclos naturales y llevando a la pérdida de calidad de la misma. A consecuencia de esa pérdida de calidad, también el agua como recurso disminuye en cantidad (si el agua de un sondeo aparece contaminada con pesticidas, deja de ser útil para el uso humano y como tal recurso desaparece).
La contaminación del agua es la acción y el efecto de introducir materias y/o formas de energía de modo directo o indirecto que impliquen una alteración perjudicial de su calidad ya sea para su uso por parte de los humanos, o para los ecosistemas.
Otra definición más sencilla es la que propone la OMS, que afirma que un agua está contaminada cuando su composición es alterada de modo que no conserva las propiedades que le corresponden en su estado natural (no olvidemos las formas de energía).
Origen y tipos de contaminación: según el modo en que se produce la contaminación, podemos distinguir entre contaminación difusa, cuando su origen no está claramente definido (por ejemplo, un río que se contamina por metales pesados al pasar por una zona minera, o el ejemplo anterior de un acuífero con pesticidas procedente de campos de cultivo) y contaminación puntual, cuando hay un foco emisor determinado que afecta a una zona concreta (por ejemplo, el vertido de aguas residuales a la salida del pueblo, camino de Chircales).
Podemos distinguir también entre contaminación natural, que es aquella que se produce cuando, por causas naturales, el agua contiene sustancias que la alteran: desde restos vegetales a excrementos de organismos acuáticos pasando por las arcillas que se arrastran tras la lluvia (El río Tinto en Huelva lleva numerosos compuestos químicos y metales disueltos tomados al circular por terrenos ricos en estas sustancias). Normalmente, esta contaminación es eliminada por los mecanismos naturales de autodepuración. Dentro de la contaminación debida a la acción antrópica, podemos distinguir tres tipos: contaminación urbana, agrícola e industrial.

La contaminación de origen urbano es la que se produce tras el uso del agua, tanto para la limpieza como para la higiene en los domicilios y comercios. Es un agua que posee una alta carga de materia orgánica (restos fecales, restos de alimentos, aceites) y productos químicos variados (detergentes, lejías e incluso ácidos fuertes).

La contaminación de origen agrícola es debida al uso masivo que se hace en la actualidad de productos fitosanitarios: abonos químicos, pesticidas o plaguicidas (herbicidas, insecticidas, fungicidas, acaricidas...). De entre los primeros, destacan los fosfatos y los nitratos, ambos muy relacionados con un tipo de contaminación llamada eutrofización. Entre los pesticidas, hay una gran variedad de moléculas orgánicas, casi siempre cloradas y muy estables. A lo largo del tiempo han sido prohibidos muchos de ellos, tras conocerse los efectos que tienen sobre las personas y el medio ambiente. Pero otros muchos se siguen usando sin tenerse la certeza de que son inofensivos (es muy difícil demostrar que producirán cáncer a las personas al cabo de veinte o treinta años. Además, las compañías que los fabrican son grandes multinacionales que cuentan con carísimos gabinetes de abogados capaces de “solucionar” cualquier denuncia que alguien haga contra sus productos). Las explotaciones ganaderas producen grandes cantidades de materia orgánica, que pueden contaminar aguas superficiales y subterráneas. Las industrias agroalimentarias también contaminan el agua tras los procesos de elaboración de sus productos.
La contaminación de origen industrial es la que provoca un mayor impacto y debido a la gran variedad de materiales y formas de energía que pueden presentarse, debe ser corregida de manera específica en cada caso. Son contaminantes de tipo industrial la ya mencionada materia orgánica, los metales pesados, los aceites y grasas minerales (empleados en los motores de explosión), los hidrocarburos, los cambios de pH, los cambios de temperatura y las radiaciones de diferentes tipos. Las industrias contaminantes son muy diversas (metalúrgicas, petroquímicas, papeleras, textiles, mineras, etc.). Otras fuentes de contaminación antrópica han sido desde siempre los vertederos de residuos, tanto urbanos como industriales, así como los talleres y desguaces de vehículos. Hoy día las leyes obligan a tomar medidas anticontaminación en todas las instalaciones antes mencionadas. No podemos olvidar como fuente de contaminación las mareas negras producidas ocasionalmente por hundimiento de petroleros (todavía nos acordaremos dentro de muchos años, de las secuelas de la catástrofe del petrolero Prestige ocurrida en las costas gallegas: la sentencia, en la que se dice que no ha habido ningún responsable, ha salido 11 años después de la tragedia). Una práctica prohibida pero habitual es la limpieza de las bodegas y depósitos de los barcos en alta mar. Esto también produce manchas de hidrocarburos.

Resumen de contaminantes que puede presentar el agua:

Contaminantes físicos: cambios de temperatura (elevación tras la refrigeración de centrales térmicas; disminución tras pasar por centrales hidroeléctricas). Las variaciones de temperatura afectan fundamentalmente a la concentración de oxígeno disuelto. Las partículas radiactivas proceden de restos de materiales radiactivos utilizados en ciertas industrias; producidos en industrias mineras (minerales radiactivos) [balsas de fosfoyesos en Huelva] o emitidos por fugas en centrales nucleares (por suerte, no es nada frecuente, aunque siempre existe el riesgo [Accidente de Fukushima en Japón]). Al emitir radiación gamma pueden producir cánceres (radiaciones ionizantes). Los sólidos en suspensión, tanto inorgánicos (arcillas y arenas) como orgánicos (restos de materia vegetal o animal) producen turbidez y, en consecuencia, hacen disminuir la actividad fotosintética de los vegetales acuáticos (que son la base de los ecosistemas que existen en las aguas). Estos componentes suelen dar sabor, color y olor a las aguas, alterando sus propiedades organolépticas.


Contaminantes químicos: hay muchos compuestos químicos que alteran las propiedades del agua. Los hay orgánicos, inorgánicos y gases. Los contaminantes orgánicos son desde glúcidos, proteínas y grasas (procedentes de restos biológicos) a pesticidas. El exceso de materia orgánica puede llevar al fenómeno de la eutrofización, y los pesticidas hacen tóxica el agua [la materia orgánica, como se ha visto, puede ser considerada como contaminante físico en cuanto a que altera las propiedades organolépticas y como contaminante químico, ya que su composición también puede influir en la pérdida de calidad del agua]. Los contaminantes inorgánicos, muy variados, pueden producir una alteración en el pH (acidez o alcalinidad) que a su vez afecta a los animales acuáticos. Las sales, como cloruros o carbonatos pueden proceder de vertidos industriales. Producen la salinización del agua, lo cual afecta a muchas especies animales y vegetales (las desaladoras y las plantas descalcificadoras emiten como producto residual una salmuera (agua con alta concentración en sal común). Los metales pesados procedentes de la minería y de la industria (mercurio, cadmio, cinc, plomo, etc.) son contaminantes muy peligrosos que por el fenómeno de bioacumulación pueden originar en los humanos enfermedades muy graves en el sistema nervioso. (Bioacumulación: los metales pesados no pueden ser eliminados y se acumulan en los tejidos de los seres vivos. Los niveles inferiores de las cadenas tróficas, como las algas unicelulares, contendrán pocos átomos en su interior, pero un animal que se alimente de estas acumulará muchos átomos de metales pesados y así sucesivamente. Los humanos, que estamos al final de estas cadenas, podemos acumular a lo largo de nuestra vida una cantidad suficiente como para desarrollar enfermedades).
Otros compuestos inorgánicos son los nitratos procedentes de los abonos. El principal problema es que una parte de estos compuestos son transformados por bacterias en nitritos, los cuales, son altamente cancerígenos por encima de una cierta concentración.
Los compuestos de fósforo, como los fosfatos, procedentes de los detergentes domésticos y de los abonos, están directamente relacionados con el fenómeno de eutrofización. Entre los gases, destacan el sulfuro de hidrógeno y el metano, procedentes de la descomposición anaeróbica (fermentación) de materia orgánica. El primero de ellos da un mal sabor y olor al agua (huele a huevos podridos).


Contaminantes biológicos: son seres vivos. La materia orgánica presente en el agua sirve de medio de cultivo para multitud de microorganismos, inocuos unos y patógenos otros. Los desechos fecales urbanos y los procedentes de granjas son eliminados en el agua residual, van cargados con una gran cantidad y diversidad de microbios (bacterias, hongos, virus, protozoos, gusanos parásitos ). También muchos compuestos contaminantes (fosfatos) permiten la proliferación de algas unicelulares que llevarán al fenómeno de la eutrofización. A través de aguas contaminadas por bacterias se pueden transmitir enfermedades muy graves como el cólera, el tifus o la disentería. En los países en vías de desarrollo mueren anualmente millones de personas debido a enfermedades transmitidas por aguas contaminadas.
En los países desarrollados, la potabilización y el control sistemático de las aguas que se consumen, junto con la depuración de las aguas residuales, consiguen que estas enfermedades sean prácticamente desconocidas. Estas medidas de higiene, en el mundo desarrollado, junto con las vacunas y los antibióticos han conseguido duplicar la esperanza de vida de las personas con relación a la que tenían hace tan sólo 100 años.


Los efectos de la contaminación en ríos, lagos, aguas subterráneas y océanos son diferentes, debido a que sus dinámicas también lo son.

Los mares y océanos, por su enorme tamaño, parecían ser inagotables en sus recursos (pesca, turismo, biodiversidad, por dar algunos ejemplos), pero ya hemos visto que tienen un límite y que estamos a punto de sobrepasarlo. Con respecto a la contaminación de sus aguas, pasaba lo mismo, parecían inmunes a todas nuestras agresiones y así, se han empleado como vertederos de basuras urbanas y  como receptores de las aguas residuales (por poner un ejemplo, hasta hace unos veinte años, las aguas residuales de unas 600.000 personas iban a parar a la bahía de Cádiz o a sus inmediaciones. La construcción y puesta en marcha de diferentes depuradoras de aguas residuales ha cambiado radicalmente el panorama. También el mar ha sido empleado como depósito de residuos tóxicos y peligrosos; por ejemplo, hasta hace poco más de quince años se arrojaban al mar los residuos radiactivos (frente a las costas de Galicia hay uno de esos peligrosos vertederos). Por si esto fuera poco, los océanos reciben desde los ríos todos los residuos arrojados en estos; también los derivados de la limpieza de las bodegas de los grandes barcos (está prohibido pero se hace). Con cierta frecuencia, tienen lugar graves catástrofes por vertidos de hidrocarburos cuando un buque petrolero naufraga (marea negra). El pescado de muchos caladeros está muy contaminado por metales pesados, debido a los vertidos industriales y al fenómeno de bioacumulación.

El mar contiene muchos recursos: pesca, navegación, turismo, algas, sal... y su deterioro está poniendo en peligro algunos de ellos. Su protección es un asunto

1 comentario:

  1. He estado en sitios de blogs por un tiempo, y hoy sentí que debería compartir mi historia porque también fui víctima. Tuve VIH durante 6 años y nunca pensé que alguna vez obtendría una cura que tenía, y esto me hizo imposible casarme con el hombre con el que debía casarme, incluso después de 2 años de relación, rompió conmigo cuando Él descubre que yo era VIH positivo. Así que me enteré de la Dra. Itua en el sitio del blog, quien trató a alguien y la persona que compartió una historia de cómo se curó y dejo sus datos de contacto. Me puse en contacto con el Dr. Itua y él realmente lo confirmó y decidí intentarlo. también y use su medicina herbaria que fue como mi carga terminó completamente. Mi hijo pronto cumplirá 2 años y estoy agradecido con Dios y también con su medicina. El Dr. Itua también puede curar la siguiente enfermedad ... Cáncer, VIH, herpes, hepatitis B, inflamación del hígado, diabetes, fibromas, recupere su ex, Si lo tiene (solo puede contactarlo en drituaherbalcenter@gmail.com o el número de Whatsapp. + 2348149277967) También puede aconsejarle sobre cómo manejar algunos problemas conyugales. El es un buen hombre

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